Seguro que te acuerdas de su historia: el año pasado, Steven, un niño de Ecuador, fue brutalmente agredido y prendido fuego por un grupo de delincuentes.
Todo ocurrió sin ningún motivo: Steven volvía solo a casa tras haber pasado el domingo por la mañana en la iglesia y en el centro Compassion.
Hoy, cuando ha pasado un poco más de un año, Steven está mucho mejor: ha logrado sobrevivir milagrosamente, su vida ya no corre peligro y vive en otra comunidad, lejos del lugar donde fue víctima de la terrible agresión
La generosidad y el afecto de numerosos amigos y padrinos como tú han logrado marcar la diferencia.
Hemos podido cubrir los costosos gastos de los cuidados médicos y las terapias para curar las graves quemaduras en todo su cuerpo.
Por este motivo, Steven se ve obligado a llevar ropa que esconda sus quemaduras y proteja su piel de la luz del sol.
Gracias a la fisioterapia, Steven ha empezado a dar algunos toques al balón de fútbol. También ha expresado un deseo: jugar en un equipo de verdad, una de sus pasiones antes de la agresión.
Steven todavía tendrá que someterse a muchos cuidados y terapias, pero estamos realmente contentos por su extraordinaria mejoría. Es casi seguro que a principios del año que viene tendrá que someterse a una nueva operación quirúrgica de reconstrucción de la piel.
Gracias de todo corazón por tu generosidad, tus donativos para el pequeño Steven han sido realmente valiosos.
Por favor, sigue orando junto a nosotros por su vida: Steven ha vuelto a sonreír, pero falta todavía mucho tiempo para que se recupere de las heridas físicas y del trauma psicológico.
